Esta publicación contiene las crónicas de un jubilado, que lleva 75 años viviendo en Zaragoza y amplía aquel viaje al pasado, haciéndolo extensivo a diversos aspectos de la ciudad. No sólo son referencias a edificios y establecimientos (algunos ya desaparecidos) los que encontramos en La Zaragoza que yo conocí, sino también detalles y anécdotas de la vida cotidiana de una sociedad que, tras las heridas de la guerra civil, tenía ante sí el reto de sobrevivir a la dictadura y asimilar los cambios que representaban la democracia y el avance de la tecnología. El autor, una vez más, nos obsequia con un mosaico de situaciones protagonizadas por aquella colectividad que, desde las cartillas de racionamiento hasta los escaparates con los primeros televisores, transita por las páginas de este libro. Por eso, La Zaragoza que yo conocí nos invita a sumarnos a un paseo muy ameno que, como ocurre con las cerezas de la jota, hará resurgir con la lectura las vivencias del lector, o las que haya conocido a través de sus antepasados.
Presentación: 29 de abril de 2015, en el Centro de Historia de Zaragoza.